miércoles, 9 de febrero de 2011

En capítulos anteriores...

Publicity: acciones por parte de empresas privadas en hechos relevantes, noticiosos o llamativos dirigidas a tener presencia en los medios de comunicación a bajo coste o coste 0.


Esto es lo que te has perdido hasta ahora, por si has estado de retiro espiritual o simplemente no te iba internet:

El primer día llegaron todos bastante perdidos, pero Nim se proclamó líder nato del grupo, y acabaron haciendo las presentaciones con litros de cerveza en el parque de la facultad.

Antonio Pineda se marcó como el más duro de los profesores, pero luego resultó ser guay. Eva, de Economía, molaba, pero luego la sustituyó Benjamín, que resultó tener antecedentes de Terminator, y amenazó con matar a alguien si no se callaban todos. José Antonio, de Relaciones Públicas y showman de la enseñanza, fue claramente el “guaperas” de los profes, pero se f*lló a todo el mundo en el examen, y ahora no les cae tan bien a ninguno. Lucía triunfó entre los chicos, por estar buena y eso, pero su último día de clase resultó ser un desastre lleno de interrupciones, con intrusiones de falsos alumnos incluidas. A Lucía la sustituyó Victor, y a Victor lo sustituyó… no sé, una chica maja.

Nim y Sandra ganaron como delegados con la “Delegación Volcán” e intentaron llevar adelante un calendario de desnudos, pero al final todo quedó en nada. Álvaro quiere hacer un musical y Nim un baile de fin de curso de esos en los que sabotean el ponche y alguien grita: Oh dios mío! Alguien ha saboteado el ponche! Alberto intentó llevarse a todos a Gredos, pero la gente estaba tiesa, y Jorge propuso ir a la nieve, pero ninguno sabía esquiar.

Paloma intentó ligar con el canario, pero él le dijo literalmente “mi pene es el que escoge”, y resultó que no la escogió a ella. Luego lo consiguió con Quisco, y ahora no saben muy bien en qué punto están. Dolo y David también sorprendieron a todos, pero ella luego ha decidido ir más por libre. Lucía y Manolillo, o Lucilillo, empezaron con no muy buen pié, pero ahora todos los quieren como rey y reina del baile. Mientras, Manu, que es muy heterosexual con fotos de chicas en biquini en su Tuenti, pone caras tiernas cuando se juegan a “beso negro” (que resulta ser un juego inocente de picos) cuando tiene que besar a otro tío.

Alberto, Nim y Álvaro empezaron buscando puertas secretas por la facultad (no sé exactamente que dieran a dónde) y conductos de ventilación por los que colarse, pero ahora buscan el bar perfecto al que irse después de clase para charlar bebiendo cerveza.

El último día de exámenes, todos se fueron a comer juntos y emborracharse. Nim se tiñó de rubio como un cantante de un grupo de pop de los ’90 y Álvaro se rapó, y el argentino se despidió de todos y prometió volver para el crucero de final de carrera.

Y eso ha sido todo hasta ahora en Publicity.




jueves, 30 de diciembre de 2010

Carta de Navidad

Cada año en esta época vuelvo a ser consciente de la imposición de los ritos navideños, que me noquean de lleno pillándonos (a pesar de calendarios) desprevenido a mí y a mi cartera. Hay que hacer regalos. Hay que hacer comidas, cenas. Hay que salir de fiesta y celebrar (¿celebrar qué?), ¡lo que sea!

Cuando eres pequeño escribes una carta con una esperanza e ilusión inquebrantables, llena de deseos materiales, pues somos entonces tan ricos en otros aspectos. Cuando crecemos, escribimos otra carta, ésta más íntima, física o mental, que no enviamos, pues lleva el mismo destino que remitente, y que está llena de deseos inmateriales, pues nos dimos cuenta de que los otros se rompen, cogen polvo o no nos llenan lo suficiente.

A mí este año, más que el rito consumista, que es el mayor de todos y que duele tanto a mi bolsillo, me viene preocupando el segundo, mi carta de los deseos. Quiero aprovecharlo, aunque sea un mero rito, para pedir todo lo que me gustaría mejorar, y aunque son muchas cosas, me cuesta ponerlo en palabras. Por eso, me quedo con tres citas que leí recientemente:

“Ayúdame a decir la verdad delante de los fuertes, y a no decir mentiras para ganarme el aplauso de los débiles. Si me das fortuna, no me quites la razón. Si me das éxito, no me quites la humildad. Si me das humildad, no me quites la dignidad. Ayúdame siempre a ver la otra cara de la medalla y no me dejes culpar de traición a los demás por no pensar igual que yo. Enséñame a querer a los demás como a mí mismo. No me dejes caer en el orgullo si triunfo, o en la desesperación si fracaso. Más bien recuérdame que el fracaso es la experiencia que precede al triunfo. Enséñame que perdonar es signo de grandeza y que la venganza es señal de bajeza. Si me quitas el éxito dame fuerzas para aprender del fracaso. Si ofendo a los demás, dame valor para disculparme. Y si los demás me ofenden, dame valor para perdonarlos. ¡Señor, si yo me olvido de ti, nunca te olvides de mí!”, Mahatma Gandhi.

Y mientras crecemos, debemos seguir apostando alto,

"Every first step is forward".

porque al final, es de nosotros de quien depende vivir nuestras vidas.

“Crearlo es la mejor manera de predecir el futuro.” Peter Drucker


Feliz 2011, y que vuestros deseos se cumplan.

domingo, 2 de mayo de 2010


Despedirse de Marina un sábado noche puede significar acabar en su casa, de gin-tonics hasta altas horas.

miércoles, 28 de abril de 2010

Primavera, go!

Es entrar la primavera y todo cambia: el ambiente, las fiestas, los días y las noches, la gente...

Es cuando aprovechamos en la familia para montar nuestros encontronazos, y es que no se le puede llamar de otra manera a tres días de fiesta seguidos sin parar de comer, cantar y bailar. Los Sánchez una semana, los Martínez la otra, se reunían este año una vez más.




Poco después, toca Feria, y gracias a que uno tiene tan buenos amigos, no faltó en ninguno de los días el rebujito, la tortilla y las sevillanas en ningún momento.





Y es que ya está aquí la mejor época del año.

domingo, 11 de abril de 2010


ARVIMAN´S BACK








Es sólo que ha estado muy ocupado últimamente...

viernes, 5 de marzo de 2010

Don´t stop

Dejadme que os cuente cómo ha sido todo desde que estoy de vuelta de Londres.

La misma noche de regreso, directo from the airport, tomé dirección Sor Francisca Dorotea, Sevilla, donde más de una veintena de personas celebramos tal variedad de motivos como regresar de países lejanos (y no tan lejanos), terminar los exámenes, cumpleaños atrasados y rostros vistos hace mucho.



Tras volver a la villa y ver a la familia cogí de nuevo un tren a la capital para salir de marcha con Sergio y Jesús, y la lluvia encaminó nuestra noche por donde le salió de las nubes, terminando por escapar a hurtadillas de la disco e ir a secar nuestros paraguas, nuestra pasta y nuestra sed en una tasca cualquiera de Sevilla con un rincón muy especial: el rincón de Paqui. Allí, cual hija honorífica junto a su placa (o mejor dicho, azulejo), estaba Paqui, que se había ganado cada centímetro de aquel espacio a base de mucho chinchón a lo largo de los años). De vuelta con la juventud, conocimos a Sully, un americano más joven que yo que resultó, según su Facebook y unas fotos que poco lugar daban a equívocos, estar casado.


El puente se dedicó completo a ADINUT en Mollina, y los chicos de negro pasamos así los días entre redes sociales, blogging y la amplia gama Google. Mucha buena comida, internet más bien escaso, vídeos de bailes caseros hasta la madrugada y lunes al sol.



Este finde comenzaba, como antigua costumbre, el jueves, y Sergio, Jesús y yo teníamos una cita con Sully, quien finalmente descubrimos que no estaba casado, y bebimos y reímos en versión DUAL en el Marbella hasta que nos duró la pasta. El viernes, Lola y Fernando (antiguo profesor, actual amigo) nos invitaban a Sole, Yashodhara y a mí a pasar una encantadora velada en su casa que se alargó hasta las tantas.

Y es que no hay nada como estar en casa...

viernes, 19 de febrero de 2010

The end

Y por fin, cual Mary Poppins, yo también sobrevolé Londres con un mar esponjoso de nubes a mis pies, mientras en el horizonte se perdían el Támesis y el sol. Las luces de la ciudad, que de vez en cuando se asomaban entre claros, iban encendiéndose tímidamente para dar paso a una noche más; noche que yo ya no pasaría más allí, sino en España. Y es que a mí también había unos muchachitos que me estaban esperando lejos.

That is it. Arviman is back.